ETAPAS EVOLUTIVAS. TÉCNICAS Y PROCEDIMIENTOS PARA TRABAJAR EL RITMO A PARTIR DE LOS 36 MESES
PROPUESTAS PARA TRABAJAR LOS RITMOS
A partir de los 3 años, conviene introducir pequeñas células rítmicas, sin dejar de lado la pulsación. Es importante empezar con ritmos sencillos, de 2, 3 y 4 pulsaciones. Pueden empezar escuchando el ritmo, seguidamente lo imitan en diferentes partes del cuerpo, y finalmente podrán marcarlo con instrumentos de percusión.
Trabajan la relación del ritmo con el lenguaje. Los niños serán cada vez más conscientes del ritmo de las palabras. Para introducir este ritmo, será indispensable relacionarlo con el movimiento, con lo que a partir de las palabras trabajadas se pueden introducir pequeños cambios.
Se pueden realizar varios ejercicios en progresiva complejidad:
- Realizar cadenas rítmicas. (1 niño inventa un ritmo y éste es imitado por los compañeros)
- Marcar el ritmo de canciones con diferentes partes del cuerpo.
- A partir de los 4 o 5 años, se imitan células rítmicas más complicadas y se aprende la distinción entre pulsación y ritmo, por lo que hay que incorporar nuevas contraseñas.
- Marcar una canción, siguiendo unas instrucciones, sin perder el ritmo.
- Adivinar canciones, trabajadas durante el curso, marcando el ritmo.
- Trabajar polirritmias.
PROPUESTAS PARA TRABAJAR EL TEMPO Y LA EDUCACIÓN
El tempo se puede trabajar a partir de los 3 años con instrumentos de percusión o con el movimiento. Se puede utilizar una misma canción con diferentes tempos, y hacer cambios graduales de rápido a lento y viceversa. Es importante, utilizar los términos lento-adagio, rápido-allegro. A partir de los 4 años, los niños responden a las indicaciones de la educadora cuando les propone cantar canciones, ejecutar movimientos o interpretar con instrumentos de percusión a diferentes tempos.
Alrededor de los 3 años, diferencias los sonidos cortos y largos, se pueden introducir las pregrafías: (- -) corto y (----- -----) largo. Se pueden usar también instrumentos de viento y realizar pequeños conciertos (corto-largo-corto). Es importante jugar con las figuras musicales para que se familiarice con ellas y realizar ejercicios con bits.
PROPUESTAS PARA TRABAJAR LA IMPROVISACIÓN
A partir de los 3 años:
- A nivel vocal, se estimula a los niños a expresarse con preguntas y respuestas a partir de sonidos.
- A nivel corporal, se pueden usar lo que E.Willems llama shocks rítmicos. Se trata de que los niños marquen diferentes ritmos corporales con los pies o las manos en diferentes partes del cuerpo; sin seguir ningún patrón determinado.; cada uno inventa su shock rítmico.
Se pueden realizar diálogos musicales con instrumentos, pero con unas contraseñas determinadas o a partir de juegos de rol.
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